El máximo tribunal de Justicia de México determinó por unanimidad, invalidar la legislación del código civil del estado de Jalisco, que luego de su reforma indicaba que el matrimonio debía ser entre un hombre y una mujer.
De esta manera las parejas homosexuales son libres de casarse en dicha jurisdicción mexica, así como también en otros tres estados, Coahuila, Quintana Roo, y la Ciudad de México sin tener la necesidad de recurrir a una demanda para poder hacerlo.
En ese sentido explicaron que mantener en la legislación de Jalisco el concepto de que el matrimonio lo comprenden dos personas de sexo opuesto generaba una violación al principio de la igualdad, luego del fallo, colectivos de homosexuales festejaron en plazas y otros sitios públicos de Jalisco.