Los seis miembros de una familia estadounidense fueron encontrados muertos en el garaje de una casa de San Antonio (Texas), informa New York Times con referencia al jefe de la Policía local, William Mcmanus.
Los cadáveres se encontraron el jueves. Los agentes fueron alertados por la llamada de un superior del marido, que era militar, después de que no consiguiera contactar con su subordinado.
Al llegar al lugar, los oficiales encontraron una nota «misteriosa» en la puerta principal, que en «jerga militar» informaba que «había cuerpos dentro» y pedía «no entrar». Tras utilizar un robot para asegurarse de que la vivienda no estaba minada, los policías ingresaron en el inmueble, pero «volvieron a salir» al notar olor a humo, comunicó McManus.
Finalmente los policías entraron en el garaje, donde en el interior de un todoterreno descubrieron los cadáveres de dos adultos de más de 30 años y de cuatro niños de edades comprendidas entre los 11 años y cinco meses. Junto a ellos se encontraron los cadáveres de dos gatos.
«Toda la imagen: los adultos, los niños, las mascotas, todo… No hay palabras para describirlo», comentó McManus, que señala que las pruebas indican que «no se trató de un accidente». En cuanto a la hora de la muerte, sugirió que fue la noche anterior.