La Guardia Marina tunecina halló los cadáveres de los 54 migrantes que se ahogaron al naufragar la patera con la que pretendían llegar a las costas europeas, informó hoy la radio Mosaique FM.
Entre las víctimas, localizadas frente a la isla de Kerkennah, había 24 mujeres y tres menores, todos ellos procedentes de países subsaharianos, según la prensa local.
Los migrantes habían abandonado la costa tunecina durante la noche del 4 de junio en dirección a la cercana isla italiana de Lampedusa y estuvieron navegando a la deriva varios días hasta que el pasado martes un barco pesquero avistó los primeros 20 cadáveres.
Desde entonces, los buzos de Protección Civil han trabajado para recuperar los cuerpos de todos los migrantes que viajaban en la patera, capitaneada por un ciudadano tunecino.
Las autoridades locales han abierto una investigación para esclarecer los hechos, en particular en el entorno de este último.