A partir de este primero de agosto, todo viajero que ingrese a Costa Rica deberá pagar una póliza que le cubra los gastos de atención médica y hospedaje en caso que se contagie de COVID-19.
El Instituto Nacional de Seguros (INS) cobra por esa póliza desde $275,4 para menores de edad y más de $964,9 para las personas mayores de 70 años, por una estadía de dos semanas.
Como si eso fuera poco, toda persona que desee ingresar a tico-landia, debe realizarse en su país una prueba de que no es portador de coronavirus y presentarla al ingresar a los aeropuertos Juan Santamaría o de Liberia.
El valor de la prueba está entre $150 y $200, de acuerdo con las estimaciones de la Asociación Costarricense de Agencias de Viajes (ACAV).
A estos nuevos costos se le suman otros existentes como el impuesto de salida de $29 y el gasto promedio de $1.438 durante los 12,6 días promedio que un turista pasa en Costa Rica.