Un cachorro de panda gigante murió el martes, cinco días después de su nacimiento en un centro de crianza en Chengdú, en el suroeste de China, confirmó la entidad a la agencia de noticias Xinhua.
El cachorro nació el viernes pasado y fue el primer panda nacido este año. A pesar de que era atendido por su madre y por los veterinarios las 24 horas, el animal murió inesperadamente. La autopsia inmediata mostró que no había ninguna anormalidad en sus órganos.
El centro comentó que la muerte repentina es muy rara entre los pandas y que está muy relacionada con el síndrome de muerte repentina de niños entre los humanos.