En un proceso inédito, impulsado por las reformas del papa Francisco, el Vaticano juzgará a diez personas por delitos vinculados a las inversiones inmobiliarias de la Secretaria de Estado en Londres, incluido el otrora poderoso cardenal Angelo Becciu, y además lo hará por primera vez con las nuevas normas aprobadas por el pontífice para acabar con el aforamiento de los altos cargos de la Iglesia.
El cardenal Becciu y las otras nueve personas, incluidos trabajadores laicos y religiosos del Vaticano y figuras las finanzas internacionales, además de cuatro sociedades, comparecerán el próximo 27 de julio en la primera audiencia del juicio acusados de delitos financieros como malversación de fondos, blanqueo de dinero, fraude, extorsión y abuso de poder.