La talentosa cantante estadounidense Mariah Carey fue chantajeada por una ex asistente personal, quien le pidió ocho millones de dólares para no publicar una serie de videos muy íntimos que afectarían su imagen personal y comercial.
Se presume que en los videos Mariah aparece en situaciones muy vergonzosas por lo que decidió demandar judicialmente a la señora Lianna Shakhnazarian por unos tres millones de dólares en concepto ruptura de contrato, extorsión e invasión de privacidad, además de exigirle que le devuelva los archivos originales y cualquier tipo de copia que tenga en su poder.
La ex asistente fue contratada en el año 2015 con un jugoso salario de 250 mil dólares y trabajó hasta el 2017. En este tiempo logró filmar en varias ocasiones y sin su permiso a Mariah; además mostró los videos a varios de sus amigos y compañeros de trabajo.
También fue acusada de ocupar una tarjeta de crédito empresarial para sus fines personales.