Si Lady Gaga presume de ser original, esta vez su novio, el actor Taylor Kinney, la superó con la broma que le hizo en San Valentín, al entregarle un anillo de caramelo.
“Al principio me dio un anillo comestible. Fue algo increíble y me puse a llorar, estaba encantada, dije ¡sí! de inmediato, y después ya sacó el anillo con un diamante en forma de corazón. Al principio fue un caramelo. Y yo estaba feliz con él”, comentó Gaga.
Gaga, quien fue halagada por su tributo a Julie Andrews durante la ceremonia del Oscar, dijo que desde que se comprometió con su novio todo es mejor para ella.
“Hace que todo sea mejor. Cuando estás enamorada y tienes amor lo hace todo mucho mejor”.
Eso sí, acudió a la entrega de la estatuilla con guantes largos que cubrieron su anillo.
“El señor Alaïa diseñó los guantes antes de que me comprometiera y quise mantener el conjunto tal como él lo había pensado en un principio” y agregó que aún no tiene fecha para la boda.