Isabel Pantoja cumple hoy 63 años. Puede ser o no la más grande pero desde la muerte de Rocío Jurado ella es la única folclórica de raza que queda.
Su vida ha sido de luces y sombras, de éxito pasión y tragedia, como las coplas que tan bien interpreta. Sabe lo que es estar en lo más alto, ser una estrella, una diva, sentirse adorada por el público.
Pero también sabe lo que es bajar a los infiernos: Quedarse viuda con un bebé, pasar dos años en la cárcel y ser carne de cañón en programas de televisión. Su cumpleaños es una buena ocasión para hacer un repaso a su vida.
Nació en Sevilla como María Isabel Pantoja Martín. Su padre Juan era cantante y falleció cuando ella cumplió la mayoría de edad. Y su madre Ana fue bailaora de joven y luego se convirtió en su fiel escudero, igual que sus hermanos Bernardo y Agustín. Gracias a su potencia de voz y su belleza racial se convirtió en artista de éxito.
La folclórica se enamoró de un torero de éxito Paquirri, que tenía dos hijos de su matrimonio con Carmina Ordóñez. Protagonizaron una boda multitudinaria el 30 de abril de 1983, ante el Jesús del Gran Poder, de Sevilla, y la novia llegó a la iglesia en una calesa tirada por cuatro yeguas blancas y vírgenes, como ella. El 9 de febrero del año siguiente nació Francisco José Rivera Pantoja, ahora conocido como Kiko, pero que recibió el apodo de Paquirrín, por parte del público.
La cantante se convirtió en toda una estrella, que recorría España y América con sus conciertos. En esa época el cine también la reclamó y la cantante que había hechos sus pinitos en series como Curro Jiménez protagonizó varias películas al lado de galanes como Arturo Fernández o José Coronado.
Fuente: Agencias