Un grupo de voluntarios de LOTO protagonizó una extraordinaria jornada de conservación ambiental al recorrer 89 kilómetros desde Managua hasta Salinas Grandes para participar en la liberación de cientos de tortugas marinas en peligro de extinción.
La actividad inició en la comunidad de Villa Esperanza, donde los participantes realizaron una importante labor de limpieza y clasificación de desechos en la playa.
Como parte de su compromiso con la educación ambiental, los voluntarios renovaron un mural ecológico que transmite el mensaje «YO NO COMO HUEVOS DE TORTUGA», promoviendo así la conservación de estas especies.
Antes de la liberación, los participantes recibieron una capacitación especializada sobre el hábitat de las tortugas, su proceso de incubación y evolución.
Los expertos compartieron instrucciones precisas sobre el manejo adecuado de las tortuguitas, incluyendo protocolos de higiene y técnicas específicas para su liberación.
El momento culminante llegó cuando los voluntarios tuvieron la oportunidad de acompañar a las pequeñas tortugas en su primer encuentro con el mar.
Algunas mostraban cierta desorientación inicial, mientras otras se dirigían con determinación hacia las aguas del Pacífico.
Esta iniciativa fue posible gracias a la colaboración entre LOTO y OE Nicaragua, un emprendimiento leonés liderado por Margarita y Gabriela, quienes realizan una labor fundamental en la preservación de especies como la tortuga carey.
La actividad no solo permitió la liberación de estas especies en peligro de extinción, sino que también sirvió para crear conciencia sobre el impacto de los desechos en las playas y la importancia de adoptar prácticas ambientalmente responsables.