Andrés Meza, médico cirujano, recibió el tratamiento de sangre de otro paciente infectado que ya superó la enfermedad, y se recuperó en 24 horas
Después de un mes de presentar los primeros síntomas de Covid-19, el doctor Andrés Meza de 41 años, ya se encuentra en su casa, luego de convertirse en el primer paciente en recuperarse gracias al tratamiento de plasma.
“Extrañamente ayer me estaba muriendo y hoy me siento, casi mágicamente, muy bien», dijo en un video grabado en la clínica.
Si bien en Chile se han registrado hasta la fecha 509 fallecidos por coronavirus, los recuperados ascienden a 20.165. Sin embargo, Meza es el primero en hacerlo a través de un tratamiento de plasma hiperinmune.
El paciente recuperado, quien además es médico cirujano, se desempeña actualmente en la Unidad de Urgencia Respiratoria y estuvo más de dos semanas internado, conectado a un ventilador mecánico.
“El 17 de abril me tocó atender a una colega del hospital, han caído con coronavirus muchos doctores y enfermeras del hospital de San Antonio. Tras atender a la doctora, le tomé el examen de PCR y le hice la licencia que se da por tres días, hasta obtener el resultado”, relató.
“Al momento de hacer la licencia, tuve un contacto bastante estrecho con ella a menos de un metro. Ella, producto de su enfermedad (aún sin saber que la tenía), tosió en varias oportunidades mientras conversábamos. Lo más probable es que ese fue el momento en el que me infecté”, dijo el doctor.
Meza, añadió que el 21 de abril fue a urgencia, ya que estaba con fiebre de 38,6 grados. “Me tomaron el PCR y me dieron licencia de tres días y control en caso de persistir con molestias”. Pero el 23 de abril la fiebre continuó y se sumó dificultad para respirar. «Me rescataron desde mi domicilio con ambulancia”, contó.
“Me llevaron a una urgencia respiratoria, donde me tomaron exámenes de sangre y un escáner de tórax, donde se ve la peor complicación que puede dar el coronavirus: una neumonía multilobar bilateral», dijo.
Fue trasladado a Santiago. “Y ahí todo empieza a empeorar. Quedé hospitalizado con soporte de oxígeno y evolucioné negativamente. Me avisaron que voy a ser trasladado a la UCI de la clínica con alta posibilidad de ser intubado”, añadió Meza.
“Si bien tenía claro que existía un riesgo, porque estaba tratando con pacientes infectados por este virus, uno tiene la esperanza que la protección que ocupas y los cuidados que tomas de alguna manera te ayudarán. Sin embargo, este virus es muy potente, y aún hay muchas cosas que no sabemos y que se irán aprendiendo en el camino”, relató.
La Fundación Arturo López Pérez, luego de ver la gravedad del cuadro de salud del doctor Meza, gestionó la transfusión de plasma hiperinmune, como tratamiento compasivo, el 26 de abril. Esta intervención la llevó a cabo el Jefe de Hematología de FALP, Dr. Raimundo Gazitúa.
Tras la transfusión todo cambió en cuestión de horas. «Un día después, a las 9 am, amanezco en muy buenas condiciones, en excelente condiciones, sintiéndome mucho mejor que el día anterior. El 26 estaba en pésimas condiciones, muriéndome, y el 27 (de abril) tenía la certeza que iba a vivir. El uso del plasma fue crucial, junto a los cuidados de la clínica”, añadió Meza.