Desde hoy, Multicentro Las Américas mantiene la Zona de Compras Navideñas 2025, una explosión de talento nica organizada por Claro Nicaragua y 1000 Maneras de Emprender que convierte el centro comercial en santuario del «regalar lo nuestro».
Más de 60 emprendedores nicas despliegan tesoros como artesanías, rompope casero y plantas ornamentales, creando un paseo donde familias podrán cazar regalos únicos hasta el 31 de diciembre, entre las 10 a.m. y 8 p.m., bajo un bosque decorado con rincones fotográficos navideños.
Gilda Tinoco, de Claro en Centroamérica, soltó la revelación esencial ante cámaras: «Nos encanta acompañar iniciativas […] que celebran la creatividad nicaragüense». No exageraba. La feria —que ya palpita en su segundo año— ofrece degustaciones de galletas decoradas, pintacaritas infantiles y talleres para pequeños, transformando cada fin de semana en carnaval de promociones bajo la novedad estrella: ¡una zona de empaque gratuito para envolver compras con estilo profesional!
Entre puestos atestados de gastronomía típica y dulces heredados de la abuela, el olor a pinabete recién horneado se mezcla con el brillo de juguetes artesanales. Imposible no sucumbir frente a manteles bordados a mano o ornamentos pensados para lucir bajo el árbol, mientras grupos familiares pasean entre ambientes temáticos que simulan pueblos nevados tropicalizados con espíritu nica. Según detalles insider, cada compra aquí repercute en economías barriales invisibles.
La fuerza motriz del evento pertenece a América Móvil, coloso de las telecomunicaciones en 23 países y líder latinoamericano en soluciones digitales. Al cierre de septiembre 2025 manejaba 407.6 millones de accesos, demostrando músculo financiero para sostener estos espacios donde, como cierra Tinoco, «la tradición, el emprendimiento y la magia se encuentran» para cambiar patrones de consumo en la región.
La experiencia Claro & 1000 Maneras omitió barreras corporales: en cada sorpresa o taller late el corazón de hacedores como Juanita Sánchez (45 años, vendedora de rompope por cinco generaciones) o Carlos Rivera (27, tallador de sueños en madera de guanacaste).
