El nicaragüense Carlos Marconi Antón Catín, de 37 años de edad, fue asesinado de un balazo y luego quemado por delincuentes desconocidos en la localidad El Chahuite, en Oaxaca de Juárez, en el centro de México.
Los informes indican que el pasado 5 de noviembre, el pinolero salió del lugar donde se alojaba a vender en las calles pan y café, con el fin de ganar dinero y seguir su viaje ilegal hacia Estados Unidos, sin embargo ya no regresó.
Posteriormente, el compatriota fue encontrado ejecutado de un disparo y calcinado, por lo que personal de una funeraria levantó su cuerpo y dio a conocer unos tatuajes para que fuera reconocido por sus familiares.
Finalmente, los parientes de Carlos Marconi Antón lograron identificarlo y ahora están realizando las gestiones pertinentes para tratar de repatriar su cuerpo, lo cual cuesta varios miles de dólares.