La estatua de la deidad griega de los mares Poseidón, en Puerto Progreso, Yucatán, fue condenada por un sector de la población a “morir” por hacer “enojar” al dios Chaac, una de las deidades más veneradas en la cultura maya y dios de la lluvia, los relámpagos y el trueno.
Dicen que Chaac atrae al huracán Beryl para castigar al pueblo por honrar a Poseidón y algunos llamaron a vandalizar a su estatua.
Existe un llamado por destruir a la estatua de Poseidón que viene captando apoyo en Internet, y se teme que eso se concrete.
Los comentarios negativos contra la estatua comenzaron desde que se instaló a finales de mayo, en el momento en el que se registraban grandes olas de calor y sequía en México.
La figura se colocó como algo decorativo, pero con el paso del tiempo fue adquiriendo un significado negativo entre la población.
A través de TikTok, una mujer señaló directamente a Poseidón de las fuertes lluvias, generando comentarios en forma de risa y otros que mostraban que se habían tomado el tema con mucha seriedad.
La conversación digital aumentó cuando una persona creó un grupo de Facebook para convocar a un grupo de personas a retirar la estatua y entregar de manera simbólica los restos a Chaac para apaciguar su furia.
La cita para destruir la imagen está programada para el lunes 15 de julio; y aunque inicialmente se trató de una broma, muchas personas lo han tomado en serio, llegando a sumar hasta 35 mil personas.
Habrá que esperar si se movilizan para ese cometido, en tanto las autoridades advierten que es ilegal destruir a la estatua de Poseidón.