La sonda solar Parker de la NASA hará su máxima aproximación al Sol en las próximas 24 horas, el 24 de diciembre, según informaron científicos de la agencia espacial estadounidense. El objeto espacial viajará a más de 190 kilómetros por segundo y se acercará a 6,1 millones de kilómetros del Sol, estableciendo nuevos récords de acercamiento y velocidad.
Lanzada en 2018, la sonda Parker ya tenía los récords anteriores de aproximación al Sol y velocidad. Para superar estos logros, la sonda realizó una maniobra gravitatoria cerca de Venus el 6 de noviembre de este año, lo que permitió ajustar su trayectoria y alcanzar la posición récord actual.
«Ningún objeto fabricado por el hombre ha pasado nunca tan cerca de una estrella, por lo que Parker nos proporcionará datos de un territorio inexplorado», afirmó Nick Pinkine, director de operaciones de la misión Parker en el Laboratorio de Física Aplicada.
Durante su aproximación al Sol, la sonda no se comunicará con la Tierra debido a las posibles interferencias de la radiación solar. Para evitar la transmisión de datos erróneos, Parker entrará en silencio radioeléctrico durante estos momentos críticos y se espera que vuelva a contactar a los ingenieros el 27 de diciembre.
El objetivo de esta misión es recoger muestras de la corona solar para comprender mejor el funcionamiento del Sol. Los científicos esperan obtener información sobre su campo magnético, composición química, propiedades internas y las causas de los ciclos de actividad solar, temas aún desconocidos.
La misión principal de Parker concluirá tras dos aproximaciones solares más en 2025. Sin embargo, se espera obtener financiación adicional para ampliar el proyecto y continuar descubriendo los misterios del Sol. Los científicos estiman que la sonda se quedará sin combustible necesario para proteger sus componentes del intenso calor solar, marcando así el final de su gloriosa misión tras haber llegado audazmente donde ningún instrumento humano ha llegado antes.