Con la intención de dejar de ser famoso, Dong Nguyen borró su aplicación de las tiendas online, pero su decisión tuvo el efecto contrario: el título ganó más popularidad y se convirtió en un juego de culto
La eliminación del juego para móviles provocó que se vendieran en internet, por cifras insólitas, celulares con la aplicación ya instalada. Por ejemplo, un usuario de eBay puso en subasta un iPhone 5s con una copia de Flappy Bird a un precio inicial de u$s650. En cuestión de horas, la cifra subió a u$s99.900, con 74 ofertas. Muchos de esos anuncios luego fueron eliminados del sitio, posiblemente por usuarios que apostaron sin tener intención de pagar.
El juego -que consiste en hacer volar a un pájaro sin que choque con una serie de tuberías muy similares a las de Super Mario de Nintendo- se hizo popular por su dificultad y su estética retro. En las últimas semanas, era lo más descargado de las tiendas de aplicaciones de Apple y Google. Se perfilaba para competir con el aditivo Candy Crush.
El domingo fue un día difícil para aquellas personas que tenían intenciones de comenzar a jugar al videojuego de moda Flappy Bird. Su creador, Dong Nguyen, agobiado por el éxito y la exposición mediática, retiró el título de las tiendas online, tanto de Google Play como de la App Store. El anuncio lo hizo a través de su cuenta de Twitter: «Lo siento, usuarios, en 22 horas retiraré Flappy Bird. No puedo soportarlo más», escribió. Horas más tarde, el vietnamita cumplió con su palabra, pero aseguró que a pesar de todo lo ocurrido, «seguirá haciendo juegos».
Tras su baja, al instante aparecieron copias, en un intento por inmortalizar a Flappy Bird en la web. Una versión exacta del juego está creada en HTML5 y permite jugar desde cualquier navegador con el ratón de la PC.