Un juez federal impuso medidas destinadas a reparar la competencia en las búsquedas en línea

Un juez federal de Estados Unidos rechazó el martes la demanda del gobierno estadounidense de que Google venda su navegador web Chrome como parte de un caso antimonopolio, pero impuso medidas destinadas a reparar la competencia en las búsquedas en línea.
Google, filial de Alphabet, deberá compartir datos clave con competidores y no podrá suscribir acuerdos exclusivos para la distribución de su buscador, según dictaminó el martes el juez federal Amit Mehta en Washington.
El juez Mehta estableció que Google tendrá que proporcionar a rivales calificados acceso a datos de su índice de búsqueda y a información sobre la interacción de usuarios. Estos datos —acumulados a partir de billones de consultas— han sido determinantes para que la empresa optimice la calidad de sus resultados, detallaron documentos judiciales. El ejecutivo principal de Google, Sundar Pichai, expresó inquietud durante el proceso judicial, señalando que este intercambio podría facilitar que los competidores realicen ingeniería inversa sobre la tecnología de la empresa, indicó Reuters. Google anunció que prevé apelar la decisión, lo que podría retrasar la aplicación efectiva de las medidas por varios años.
Al mismo tiempo, la sentencia prohíbe a Google mantener cualquier contrato exclusivo que restrinja la preinstalación de productos de competidores en dispositivos nuevos. Quedan afectados acuerdos de distribución con compañías como Samsung Electronics, Motorola, AT&T y Verizon, bajo los cuales Google pagaba sumas multimillonarias anualmente para asegurar un lugar privilegiado como buscador predeterminado en teléfonos y computadoras, de acuerdo con datos presentados en el juicio. El objetivo es evitar que la empresa utilice estas alianzas para obstaculizar el acceso a alternativas en buscadores, asistentes de voz y aplicaciones de inteligencia artificial generativa, precisó el tribunal.