Un equipo internacional de investigadores del Instituto de Ciencias Fotónicas (España) ha desarrollado un nanochip con nanopartículas de oro que puede diagnosticar el cáncer incluso cuando la enfermedad afecta solo a unas pocas células.
El coordinador del proyecto, el profesor Romain Quidant, explicó que el nuevo dispositivo representa una plataforma de ‘lab-on-a-chip’ (laboratorio en un chip), que tiene varios sensores distribuidos en una red de microcanales de fluidos. En la superficie de este minilaboratorio están incorporadas las nanopartículas de oro que atraen a los marcadores de proteínas que circulan en la sangre.
De acuerdo con los científicos, en el chip se inyecta una gota de sangre y los marcadores de cáncer, al pasar por los microcanales del chip, provocan cambios en la ‘resonancia plasmónica’. El dispositivo monitorea estos cambios, donde la magnitud está relacionada con la concentración y el número de marcadores en la sangre del paciente. Así se evalúa el riesgo para el paciente de desarrollar un cáncer.
Quidant comentó que «lo más fascinante del descubrimiento que hemos hecho es que somos capaces de detectar concentraciones extremadamente bajas de esta proteína en cuestión de minutos, lo que hace de este dispositivo una herramienta de última generación, un instrumento ultrasensible y poderoso que mejorará la detección temprana y el seguimiento del tratamiento del cáncer».