Un patógeno viral que ‘aprendió’ a pasar de las plantas a los insectos, dando de esa forma un salto evolutivo de 1.600 millones de años, podría estar detrás de la masiva extinción de colonias de abejas en EE.UU., según un nuevo estudio.
La extinción de millones de abejas en EE.UU. durante la última década podría deberse a un virus de la mancha anular del tabaco (TRSV) que normalmente infecta a las plantas, según un nuevo estudio de microbiologos chinos publicado por la revista especializada ‘American Society for Microbiology’.
“Los resultados de nuestro estudio aportan la primera evidencia de que las abejas expuestas al polen contaminado con el virus también pueden ser infectados”, dice el autor principal Ji Lian Li, de la Academia China de Ciencias Agrícolas en Pekín.
Según el estudio, las altas tasas de infección sistemática y la disminución de las poblaciones de las abejas melíferas se registra principalmente en los meses de otoño, justo en un momento de actividad del virus TRSV que invade rápidamente los frijoles, afectando a las abejas que los polinizan, provocando su muerte.
“La creciente prevalencia de TRSV junto con otros virus de las abejas se asocia a una disminución gradual de las poblaciones y apoya la hipótesis de que las infecciones virales tienen un significativo impacto negativo en la supervivencia de la colonia de abejas”, concluyen los investigadores.
La creciente desaparición de las abejas en varias regiones del planeta ha despertado la alarma mundial, debido a que aproximadamente el 75% de los cultivos depende de la polinización de insectos, y por consiguiente, su extinción podría afectar a la seguridad alimenticia a nivel mundial.