¡Demandando Justicia! Remiten a juicio a sacerdote nicaragüense acusado de violar a niña en Boaco

Clamando castigo ingresó a los juzgados de Managua la mañana de este jueves la madre de la niña de 12 años que fue supuestamente víctima de violación y amenazas por parte de Monseñor José Leonardo Urbina, en el departamento de Boaco.

Monseñor José Leonardo Urbina
Monseñor José Leonardo Urbina

“Abusaste de la confianza de mi hija. Viejo violador. Jueces, como madre, les pido justicia. Mi hija está sufriendo. No saben cómo me siento como madre. Les pido a la gente de Boaco que me apoyen, por qué lo apoyan a él si es un violador”, dijo entre gritos y lágrimas, la madre de la criatura.

El sacerdote fue llevado al Juzgado Segundo Distrito Penal de Adolescencia y Violencia, en donde por Ministerio de Ley se le realizó la Audiencia Inicial por los supuestos delitos de Abuso Sexual, Violación a una menor de edad y Lesiones Psicológicas.

De acuerdo con el libelo acusatorio, el cura llegaba donde la abuela y le pedía “prestada” a la niña para llevarla a “comprar tortillas”, y la pequeña creía que aquel hombre vestido de sotana era su “padrino”, hasta que un día presuntamente la violó.

Urbina Rodríguez era el párroco de la iglesia del Perpetuo Socorro en la ciudad de Boaco, y la menor lo llamaba padrino, debido a la amistad que este tenía con su abuela materna.

Según la acusación, en diciembre de 2021, el cura Urbina prestó a la niña para ir a comprar tortillas en su camioneta.

Sin embargo, el acusado llevó a la menor a un lugar solitario ubicado del Night Club Colombina 100 metros al norte en la ciudad de Boaco, donde la manoseó, pidiéndole hacer el acto sexual.

La menor se negó a las peticiones del sujeto, y se vio obligado a llevarla de regreso a la casa de su abuela.

En enero de 2022 el religioso volvió a prestar a la pequeña con el mismo pretexto y la llevó a un lugar solitario, proponiéndole que sostuvieran relaciones sexuales.

La adolescente se volvió a negar a las peticiones, por lo que la empezó a manosear.

Cuatro meses después, en abril pasado, el acusado solicitó nuevamente a la abuela que le prestara a la niña con la misma excusa de ir a comprar tortillas, la llevó al mismo lugar solitario y esta vez presuntamente sí la violó.

Luego de abusar de ella, la amenazó que si decía algo la “iba a mandar a matar”, y como consecuencia de la agresión sexual la niña presenta lesiones psíquicas y emocionales que requieren tratamiento psicológico.

Durante la audiencia la Fiscalía ofreció las pruebas recabadas en contra del presunto cura violador ante la jueza Miroslava Chamorro Calero del juzgado Segundo Especializado en Violencia de Managua, quien le mantuvo la prisión preventiva y remitió a juicio oral y público en fecha próxima.

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