Lo que iba a ser un gran fin de semana entre amigos para despedir el año se transformó en una pesadilla.
Una que se volvió viral, porque un testigo llegó a grabar con su celular el momento en el que el vehículo empezó a deslizarse por la superficie del ferry, hasta caerse por la borda.
Estuvo bastante tiempo flotando en el mar y todos los ocupantes de la embarcación los vieron alejarse lentamente. Terminó hundiéndose cerca de la costa de Brisbane, en Queensland, Australia.
“Por suerte no había nadie adentro. Aunque sí habían dejado teléfonos, tarjetas de crédito, documentos y otros objetos valiosos”, contó Chloe Swift, una testigo, a ABC.
“Había varias chicas llorando por todo lo que perdieron. Los muchachos se lo tomaron con más calma”, agregó.