El rapero Kanye West ha obligado a las modelos de su desfile de la Semana de la Moda de Nueva York a firmar un contrato de confidencialidad para que no puedan revelar a la prensa detalles sobre su vida privada o la de su mujer, Kim Kardashian, y su hija North (2). Quien incumpla esa condición podría enfrentarse a una demanda millonaria.
«Kanye ha perdido a algunas modelos muy importantes al pedirles que firmen el contrato, básicamente porque establece que podría demandarlas por hasta 10 millones de dólares si hablan de él en público. Es una cantidad ridícula y algunas modelos se negaron a firmar. Ni siquiera se le considera un gran talento, todo el mundo sabe que su desfile está ahí únicamente por la expectación que genera en los medios, así que muchas chicas prefieren que no se las asocie con él», explica una fuente.
Kanye no solo ha conseguido enfadar a las modelos, también ha molestado a varios diseñadores al decidir en el último momento que quería ofrecer un desfile para presentar la segunda temporada de su colección Kanye WestX Adidas Originals, lo que ha obligado a reorganizar los show de otros artistas, como el de Anne Bowen.
«Kanye sabe que es una sensación mediática y no es ético hacer algo así. Es como si nosotros fuésemos David y él fuera Goliath. Nosotros tenemos que poner nuestro corazón y nuestra alma en los desfiles, y no deberían pisotearnos así», explicaba Anne a Women’s Wear Daily.