El cantante Julio Iglesias, de 75 años, deberá responder por la demanda de paternidad interpuesta por su supuesto hijo Javier Sánchez Santos.
El juez de Valencia José Miguel Bort informó que ambas partes deberán presentarse el próximo 4 de marzo y el cantante deberá realizarse una prueba de ADN.
Julio Iglesias, se ha negado a realizarse una prueba de ADN con la que refutar el resultado de la presentada por el abogado de Sánchez Santos, obtenida en Miami a través de una agencia de detectives, que reveló una coincidencia genética del 99,9%.
El intérprete, mundialmente famoso por éxitos como “Me olvidé de vivir” y “Me va, me va”, puede no comparecer ante el juez, pero ello, como su rechazo a realizarse el test genético, jugaría en su contra, afirma el abogado Fernando Osuna, que ha representado a Javier Sánchez Santos.
Javier Sánchez, de 42 años, fue supuestamente fruto de la relación que Julio Iglesias mantuvo con su madre, la bailarina portuguesa Edite Santos, en una sala de fiestas de Sant Feliu de Guíxols, en Girona, cuando estaba casado con Isabel Preysler.
En los años noventa, la madre de Javier demandó al cantante en representación de su hijo, que entonces era menor de edad.