Jerry Lee Lewis, una de las máximas leyendas del rock and roll, murió a los 87 años en su casa localizada en el condado de Desoto, Mississippi, al sur de Memphis, Estados Unidos.
La noticia fue confirmada este viernes después de que ayer jueves corrieran rumores de su fallecimiento que luego fueron desmentidos por sus allegados.
El músico y cantante fue uno de los pioneros del género y la voz de grandes éxitos mundiales como Great Balls of Fire y Whole Lotta Shakin’ Goin’ On, de la década de 1950.
Lewis nació en Louisiana y comenzó a tocar el piano a los 9 años. Junto a Chuck Berry, Elvis Presley y otros más, fue una de las principales figuras de la era del rock en 1950 y un maestro del espectáculo, apodado «The Killer», cuyas presentaciones crudas y desinhibidas enloquecían a sus seguidores.
El artista también fue uno de los miembros originales del Salón de la Fama del Rock and Roll.
Además, Lewis fue protagonista de una gran polémica porque hizo su esposa a una menor de edad.
Eso evitó que alcanzará la fama total. Antes de la polémica, era como el principal rival que tuvo Elvis Presley. Luego de la polémica lo satanizaron y pasó a segundo plano.