El príncipe Harry le dio tremenda sorpresa a su esposa Meghan Markle, horas después de la boda, al regalarle un anillo que perteneció a la princesa Diana.
La guapa estadounidense combinó la enorme sortija que no se veía desde 1997 y la que perteneció a su suegra con su segundo vestido.
La joya habría sido adquirida por la fallecida Diana, después de que se separó de su esposo, el príncipe Carlos.
Algunas personas aseguran que Diana adquirió la joya como símbolo de independencia de la monarquía y que en aquel entonces le habría costado unos 75 mil dólares.
Ahora la preciosa joya pertenece a la guapa Meghan. Esta no es la primera vez que Harry demuestra que su madre siempre está presente en su relación.
El anillo de compromiso que le dio a la exactriz en el mes de noviembre, también estaba hecho con piezas de la joyería de la princesa Diana.