Una joven de 19 años, identificada como Claire Mack y residente en Chicago, Illinois, Estados Unidos, fue a un hospital para tratarse de dolores en el pecho, resfriados y una tos persistente, y cuando regresó a su casa, su vida había cambiado para siempre.
Y no es que le hayan recetado algo que causaran cambios en ella. Lo que ocurrió fue que cuando la joven le comentó al doctor sobre sus síntomas, le ordenó una radiografía y el estudio reflejó que el corazón de la joven no estaba en su lugar.
Los rayos X confirmaron que el corazón de la joven está atípicamente inclinado hacia el lado derecho del pecho, en lugar del izquierdo, lo cual es conocido como dextrocardia, una afección congénita que no es considerada como una enfermedad, por lo cual no tiene tratamiento.