La joven británica Analee Gibney, de 24 años, oriunda de la ciudad de Oxford, dio a luz a una bebé que nació con una extraña enfermedad que hizo que su cerebro se desarrollara fuera de la cavidad craneal.
A las 20 semanas del embarazo los doctores detectaron que su hija May Rose Gibney desarrolló una protuberancia detrás de su cabeza y nació el pasado 9 de marzo a través de una cesárea tras 8 horas de labor y solamente le dieron bajas esperanzas de vida.
La niña nació con la enfermedad llamada encefalocele, una extraña condición de la espina bífida la cual ocasiona un bulto en forma de saco a través de una abertura en algún punto a lo largo del centro del cráneo, entre la nariz y la nuca, más frecuentemente en la parte de atrás de la cabeza. Se produce cuando el tubo neural no se cierra completamente durante el embarazo.
Increíblemente la bebé vivió más de lo esperado y falleció apenas la semana pasada dejando un sentimiento de vacío en su joven madre quien agradeció que en sus últimos días de vida la niña pudo abrir sus ojos como una manera de despedirse de este mundo y de su amorosa mamá.
Ahora aseguró que todos los fondos que recibió en donativos los entregará a una fundación que ayuda a niños que nacen con esta extraña condición cuyas causas se desconocen.