Durante el periodo colonial, Nicaragua formó parte de la Capitanía General de Guatemala, convirtiéndose entonces en la principal vía de comunicación entre los océanos Pacífico y Atlántico, por tener un sistema de transporte lacustre que facilitaba el movimiento de mercaderías y personas a regiones aledañas.
El Realejo fue en particular uno de los puertos principales en el Pacífico de la época, donde se construyeron gran parte de los galeones entre Manila y Acapulco.
El conservador Fruto Chamorro fue elegido el 26 de febrero de 1853 Supremo Director del entonces Estado de Nicaragua y bajo su mandato se creó una nueva Asamblea Constituyente que elaboró una Constitución, que puso fin al período del Directorio.
Durante esta época Nicaragua se había convertido en objeto de deseo para dos grandes potencias de entonces, que eran Gran Bretaña y Estados Unidos, dadas las condiciones que su territorio ofrecía para la construcción de un canal entre los océanos Atlántico y Pacífico.
Ante la posibilidad de tener un canal interoceánico, el 12 de agosto de 1841 el superintendente de Belice, acompañado por el supuesto monarca mosquitio desembarca en San Juan del Norte y comunican a las autoridades nicaragüenses que esa ciudad y el resto de la Costa Atlántica pertenecen al reino de Mosquitia. En fecha tan temprana como el 10 de septiembre el embajador inglés hace saber al gobierno nicaragüense que el reino de Mosquitia es un protectorado británico, cuyos límites se extienden desde el Cabo Honduras hasta la desembocadura del río San Juan.
La realidad es que detrás de esta decisión y de la creación de este llamado reino en la llamada Costa de los Mosquitos estaba la posibilidad de la construcción de un canal interoceánico, porque Nicaragua y Panamá siempre fueron los lugares idóneos para la creación de esa vía interoceánica.
Por otro lado, para 1835 los estadounidenses ya habían comenzado sus movimientos para la construcción de un canal por Panamá, por lo que Inglaterra solo tenía la posibilidad de hacerlo en Nicaragua y para ello se aprovecharía el tramo navegable del río San Juan, que desde su desembocadura llegaba hasta el Lago de Nicaragua. San Juan del Norte quedó incorporado al reino de Mosquitia y paso a denominarse Greytown.
Ante esta posibilidad, frente a la potencia británica, las autoridades nicaragüenses optaron por la vía diplomática y establece conversaciones con Inglaterra implicando a los Estados Unidos. De esas conversaciones surgió el Tratado Clayton-Bulwer, firmado el 19 de abril de 1850 por británicos y estadounidenses, en el que Gran Bretaña renunció a sus pretensiones sobre un futuro canal interoceánico en Nicaragua y que San Juan del Norte fuera declarado puerto libre y territorio neutral bajo el reino de Mosquitia.
En 1909 el presidente de Nicaragua se negaba a contratar empréstitos financieros en Nueva York, porque no quería negociar la posible vía interoceánica en las condiciones que los Estados Unidos querían imponer, mientras se buscaba el apoyo de otras potencias que asumieran la costosa vía.
Ese mismo año se contrató con Inglaterra un préstamo por 1 250 000 libras esterlinas, que en aquel entonces era una gran cantidad de dinero, para impulsar el ferrocarril al Océano Atlántico y mejorar las finanzas del país. Al mismo tiempo, se habló de una oferta de concesión de un canal interoceánico por Nicaragua, a otras potencias, en este caso a Japón o Alemania, pero no fue posible.
Cinco años después, en 1914, se firmó el Tratado Bryan-Chamorro, mediante el cual se cedían a Estados Unidos todos los derechos para la construcción de un futuro canal interoceánico a cambio de tres millones de dólares, porque a pesar de que el Canal de Panamá había sido construido en 1903, la zona continuaba siendo de interés estratégico.
Además, este Tratado también contempló la entrega a Estados Unidos el derecho de establecer una base militar en el golfo de Fonseca durante un período de 99 años y se le cedían en arriendo las Islas del Maíz, también conocidas como Corn Island, por idéntico lapso de tiempo.
Como se puede apreciar esta historia del Canal Interoceánico entre los océanos Pacíficos y Atlántico se remonta a varios siglos, incluso fue planteado en la Primera Proclama Pública del General de Hombres y Mujeres Libres, Augusto C. Sandino.
El 20 de marzo de 1929, el general Augusto C. Sandino redactó el Plan de Acción del Supremo Sueño de Bolívar, un documento de 44 puntos, entre los cuales plantea la necesidad de crear una patria y un ejército latinoamericano, una sola economía, un sistema de justicia regional y resalta nuevamente su visión sobre el Canal Interoceánico.
El General Sandino consideró que la construcción del Canal Interoceánico por Nicaragua debía tener la participación de muchos países, no solo de una potencia, entre ellos gran parte de América Latina, porque con los derechos que se cobren por el paso de las naves se podría eliminar la pobreza y procurar el progreso de Nicaragua.
El Presidente Daniel Ortega retomó la idea de construir un canal que uniera los océanos Atlántico y el Pacífico e impulsa la creación de esta vía con la participación de los países miembros de la Alianza Bolivariana para los Puebos de Nuestra América (Alba) y de otras economías que vienen a invertir a Nicaragua para beneficio de la población, porque no solo se les proporcionará trabajo para eliminar la extrema miseria, sino que proporcionará recursos para necesidades socio-económicas, entre ellas la educación y la salud, así como aspectos de la cultura tradicional y deporte.
Durante el discurso que pronunció el 21 de febrero de 2012, el líder sandinista anunció que proyecta construir un “canal húmedo” interoceánico utilizando el río San Juan, para lo cual buscará fondos con los países de la Alba para ejecutar ese megaproyecto.
En el acto por el 78 aniversario del asesinato del General Augusto C. Sandino, Daniel dijo que el vicecanciller Manuel Coronel Kautz coordinará un equipo de trabajo para realizar estudios de factibilidad y gestionar recursos para llevar a cabo el Gran Canal Interoceánico de Nicaragua.
El 7 de junio de 2013 Nicaragua entregó a una empresa China la concesión del nuevo canal y el 13 de ese mes el congreso ratificó la adjudicación.
El otorgamiento de Nicaragua se efectuó al empresario chino Wang Jing, titular de la entidad HKND, una concesión hasta por 50 años de explotación, prorrogables por un tiempo igual, para construir el canal, que uniría los océanos Atlántico y Pacífico y que incluiría además dos puertos de aguas profundas, dos aeropuertos, zonas francas, un oleoducto y un canal seco mediante ferrocarril de punto a punto.
La Asamblea Nacional aprobó el 3 de julio de 2012 por mayoría de votos la ley que autoriza construir un canal interoceánico de gran calado entre el Atlántico y el Pacífico, una obra que durará varios años, entre cinco y 15, que inicialmente se calculó su costo en 40 000 millones de dólares, pero que después se pronosticó en 50 000 millones.
El 13 de junio de 2013 la Asamblea Nacional aprobó la construcción del Canal. Con 61 votos a favor, 25 en contra y una abstención, con lo cual se quedó la legislación Ley Especial para el Desarrollo de Infraestructura y Transporte Nicaragüense atingente a El Canal, Zona de Libre Comercio e Infraestructuras Asociadas.
El acuerdo marco de concesión e implementación para la construcción del Canal Interoceánico por Nicaragua fue firmado el viernes 14 de junio de 2013 por el Comandante Daniel Ortega Saavedra, presidente de la República, con la empresa internacional Hong-Kong Nicaragua Canal Development Investment Co. (HKND Group).
A finales de octubre de 2013 una delegación de empresarios, especialistas y del gobierno de Nicaragua visitó la República Popular China para tener un contacto con la empresa del país asiático encargada de la construcción del Gran Canal Interoceánico.
La comitiva visitó Beijing, Wuhan, Xuzhou y Hong Kong, cumplimentando la invitación de la compañía HKND Group, de Hong Kong.
El 6 de enero de 2014 la Autoridad del Gran Canal Interoceánico de Nicaragua y la Comisión del Proyecto de Desarrollo del Canal de Nicaragua informaron, mediante un comunicado, al pueblo nicaragüense y a la comunidad internacional que durante todo el año 2013 avanzaron los Estudios Técnicos de Factibilidad, Financieros, Económicos, Ambientales, Culturales y Sociales, conforme su Planificación a entera satisfacción de la Autoridad del Gran Canal, la Comisión y el Gobierno de Nicaragua.
El documento señala que los estudios de factibilidad y el inicio de la construcción del Proyecto del Gran Canal Interoceánico de Nicaragua se realizarán en los tiempos previstos, señalándose que el inicio de las Obras está contemplado para finales de 2014.
El documento fue firmado por Manuel Coronel K., Presidente de la Autoridad de el Gran Canal Interoceánico, y por Paul Oquist K., Secretario Ejecutivo Comisión del Proyecto Desarrollo del Canal de Nicaragua.
Para el tercer trimestre de 2014 estará listo el estudio de factibilidad para la construcción del canal, según expresó a medios de prensa Wang Ying, uno de los dirigentes empresariales de la entidad china que está a cargo de la construcción del Gran Canal Interoceánico de Nicaragua.