En las próximas horas la familia de Kim Kardashian y Kanye West recibirá a un nuevo miembro, con el nacimiento de su cuarto hijo a través de un vientre de alquiler.
Medios especializados en farándula informaron que la mujer que les ayudará a tener a su nuevo niño está hospitalizada, lo que hasta el momento no se ha confirmado es si el rapero y la mediática están presentes.
Hay que recordar que Chicago West también nació mediante vientre sustituto el 15 de enero de 2018, y Kim sí estuvo en el lugar del nacimiento.
Y es que la empresaria tiene situaciones complicadas de salud que la pondrían en riesgo si se volviera a embarazar, debido a placenta acumulada. Esta condición se presenta debido a restos de placenta en las paredes uterinas.
Los medios de comunicación locales afirman que la pareja tomó la decisión debido a que aún tenían un embrión fertilizado y pensaron que ahora sería un buen momento para tenerlo.