Placer extremo: Coloca tu dedo pulgar sobre los labios mayores, y el índice sobre los menores. Aplica una suave presión a la vez que deslizas tus dedos hacia fuera de los labios. Después, continúa este movimiento a lo largo de cada labio, alternando ambas manos.
Sensación al máximo: Desliza la yema de tu dedo medio derecho hacia arriba y hacia abajo varias veces, entre los labios mayores y menores, primero a un lado de la vulva y luego a otro. Da un masaje alrededor de la cabeza del clítoris en una dirección y varias veces en la otra.