Cuando en una relación hay una infidelidad, por lo general la mujer afectada busca culpar a la amante y no a su pareja.
A principios de 2017, hubo una noticia que causó polémica en las redes. En Brasil, una mujer humilló a la amante de su esposo, cortándole el pelo, desnudándola y golpeándola, y la llevó arrastrada por las calles de su vecindario.
En China sucedió otro caso parecido: una mujer reconocida como “la vengadora”, que luego de descubrir a su marido con otra mujer, se dedicó a “ayudar” a otras mujeres en situación similar, para humillar públicamente a otras amantes. Esto es algo que ha llamado la atención no solo del público en general sino también de los especialistas.
El psicólogo y especialista en parejas Gervasio Díaz Castelli, aseguró que todo este razonamiento tiene, principalmente, su origen en «la competencia entre mujeres y básicamente en un pensamiento de extracto machista que tiene la mujer por la que culpa a la ‘otra’ de ser la que llevó a su hombre al engaño».
Díaz Castelli explicó que «la femineidad se construye en espejo con otra mujer y genera la fantasía de que «la otra» tiene el secreto para acceder a ese objeto deseado: el hombre, su hombre».
Asimismo, le atribuye el enojo hacia la otra mujer al hecho de que «cuando hay hijos y una historia de por medio con la pareja, no es fácil direccionar el reproche hacia el hombre ya que, casi por una cuestión de preservación, se elige resguardar la unión familiar» y así, en estas situaciones de desilusión, la furia cae sobre la amante en vez de recaer sobre el infiel.
En estos casos, la mujer debe saber que quién le prometió respeto el día de su boda es su esposo, y no la amante. La mujer a la que llamas “la otra” ni siquiera la conoce y no es su amiga para mostrarle respeto o comprensión.
Asimismo, es importante recalcar que la violencia solo genera más problemas, y que atacar a la amante no solucionará los problemas en su matrimonio. Lo recomendable es conversar con su pareja y tomar una decisión, si deciden seguir juntos o no; el amor es la base de todo y si aún existe esa chispa entre ambos, podrán recuperar el tiempo perdido.