Mujer para lucir tus piernas sin complejos, manteniéndolas sanas y bellas, sólo tienes que cumplir con una rutina diaria de cuidados sencillos.
Al final del baño usa agua fría para tonificar los músculos, tensarlos y estimular la circulación. Al secarte trata de hacerlo con golpecitos y sin frotar para evitar perder la barrera de protección de la piel.
Aplica una vez a la semana un exfoliante para remover las células muertas que impiden que las cremas penetren adecuadamente. Acuérdate de hacerlo también antes de depilarte.
Cuando la piel de las piernas se reseca luce áspera, escamada y poco atractiva. Para revitalizarla aplícate una hidratante después del baño y nunca prescindas de éste. Recuerda que la capacidad de la piel de retener la humedad se pierde con los años.
El vello de las piernas puede eliminarse con varios métodos. Lo importante es que elijas el que más te conviene de acuerdo con tu tipo de piel, tu resistencia al dolor y tus necesidades.
Con la edad nuestra piel pierde elasticidad, porque su capa interna, que es su sostén, se deteriora. Para mantener unas piernas tonificadas y en forma haz ejercicio con regularidad. Caminar, trotar, nadar o montar bicicleta ayudan a moldear las piernas, las relajan y mejoran su aspecto.
Una dieta balanceada y beber mucho líquido son básicos para mantener la salud de tus piernas y tu cuerpo. No ingieras sal en exceso, porque estimula la retención de líquidos y las piernas se hinchan.
Evita fumar y restringe las bebidas alcohólicas lo más que puedas; está comprobado que favorecen directa o indirectamente a la mala circulación periférica de las piernas.
No permanezcas de pie durante períodos largos de tiempo, o sentada con las piernas cruzadas. Aléjate del calor y del agua caliente.
No utilices ropa demasiado ajustada o fajas, pues dificultan la circulación y pueden propiciar la aparición de várices y de celulitis. Tampoco utilices zapatos de tacón alto.
Descansa al menos 15 minutos todos los días con las piernas levantadas para estimular la circulación.