La prestigiosa diseñadora venezolana Carolina Herrera, de 77 años, que celebra más tres décadas en la industria de la moda, fue lapidaria con aquellas mujeres que intentan ocultar sus años con ropa que ya no es la adecuada.
Nacida en Caracas en 1939, Herrera, elegida por estrellas del cine como Nicole Kidman o Angelina Jolie para lucir sus sofisticados diseños en la alfombra roja, prefiere prendas que sienten bien, que se amolden a los gustos y a la edad de la mujer. «No hay cosa que avejente más que vestirse de joven», sentencia la diseñadora, quien presentó en Madrid su libro Carolina Herrera 35 years of fashion, de la editorial Rizzoli.
«(Hoy) lo feo es lo que se usa; creo que muchas mujeres abren su armario y se preguntan: ‘¿Qué es lo más feo que tengo para ponerme?'», añade.
La modista, que con su mítica camisa blanca demuestra que «menos es más» a la hora vestirse, confiesa que vive ajena a lo último que se usa: «No sigo las tendencias, no me interesan, parecen uniformes. No me gusta ver a todo el mundo igual, con el mismo bolso, zapatos o pantalón».
«No diseño para mí, sino para miles de mujeres que quieren estar bellas», sentencia. En sus reflexiones es clara y estricta. Tras una extensa trayectora, sabe que vestir bien «da poder» y que con un bonito vestido «se llega más a la gente».