Dos hombres acusados por presuntamente haber violado a una joven peruana fueron declarados inocentes luego de que tres jueces italianas determinaron que las declaraciones de la chica no eran creíbles ya que es «demasiado masculina y poco atractiva»; y que se inventó toda la agresión.
En el resto del fallo, el tribunal afirmó que el acusado «ni siquiera le gustaba la joven, lo cual en su opinión se vería confirmado por el hecho de que este había registrado el número telefónico de la mujer con el sobrenombre de ‘Vikingo‘ en referencia a su aspecto masculino».
Según cuenta la víctima, luego de una larga noche de escuela decidió irse a un bar a lanzarse un par de cervezas junto a dos compañeros de clases. Posteriormente uno la violó mientras el otro vigilaba.
Los degenerados fueron absueltos de dichas acusaciones ya que de haber sido declarados culpables hubieran enfrentando una pena de 5 años de prisión, en el caso del violador, y tres años para el apañador.