El papa Francisco viajará a México a bordo de un Airbus A330-200 propiedad de la empresa Alitalia y que ha sido utilizado en sus últimos dos viajes.
La aeronave tiene una capacidad para transportar a 250 personas y es rentado a la empresa italiana porque el papa no cuenta con avión propio para sus viajes. Sin embargo este es pilotado por miembros de la Fuerza Aérea de ese país.
La empresa se negó a revelar el costo del alquiler del avión, mismo que fue utilizado para la gira de Francisco a Estados Unidos y Cuba así como en su travesía por África.
Sin embargo, se estima que el gasto de alquiler es sufragado con el precio de los boletos que pagan los periodistas que acompañan al papa y en menor medida por El Vaticano y la misma empresa Alitalia.