El accidente se produjo cuando una pasarela instalada sobre una gigantesca carroza de la escuela Unidos da Tijuca, con una decena de personas que bailaban encima, se desplomó por motivos que todavía se desconocen.
La policía y los médicos empezaron de inmediato la evacuación de los heridos, que según el Ayuntamiento de Río son al menos 15, de los cuales cinco fueron trasladados a hospitales próximos y dos de ellos se encuentran en estado grave.
El desfile de Unidos da Tijuca comenzó con normalidad, pero cuando su segunda carroza, inspirada en Nueva Orleans, iniciaba el avance por la pista del Sambódromo, la pasarela, instalada varios metros por encima del tercer piso, se desplomó.
La dirección de la escuela decidió continuar con el desfile y ordenó a sus diferentes a las que avanzaran por la pista de Sapucaí, pese a que la policía y los efectivos sanitarios continuaban atendiendo a los heridos en la carroza.
La escuela obedeció órdenes y sus 3,600 miembros continuaron con el espectáculo, aunque muchos lo hicieron llorando.