La policía turca detuvo en Sanliurf, a cuatro sospechosos del atentado con cochebomba que el domingo mató a 36 personas en Ankara.
La policía efectuó esa redada en función de la información de que el vehículo utilizado en el atentado había sido comprado en esta ciudad del sudeste de mayoría kurda cerca de la frontera con Siria.
El vehículo fue comprado en esta ciudad y luego conducido hasta Ankara, según los medios de comunicación.
El atentado del domingo, el tercero en menos de seis meses en la capital turca, no ha sido reivindicado pero las autoridades acusan a los rebeldes kurdos de haberlo cometido.