Bertilda Montiel Baltodano, de 63 años, se salvó de estar en la lancha que naufragó en el mar Caribe de Nicaragua gracias a una caída que sufrió el viernes.
Ese hecho provocó que la turista, vecina de Desamparados, no abordara la embarcación, según contó ella misma al diario La Nacion.
«El viernes fuimos a comer todos a un restaurante y cuando iba de camino me caí; me resbalé en un charco y me golpeé la espalda. Ahí fue cuando decidí que no iba a ir al paseo en la lancha», dijo Montiel al diario la Nación de Costa Rica.
«Yo me fui a despedir del grupo, fui al muelle, los vi subirse a la lancha y les dije adiós, todos llevaban chaleco», añadió la mujer, oriunda de Limón.
Junto a Bertilda, otros cuatro turistas costarricenses optaron por no subir a la embarcación, ya que padecían de diferentes enfermedades.