Este miércoles, en la región de Cachemira controlada por Pakistán, ocurrió un accidente de tránsito que causó la muerte de 15 personas y dejó a dos más heridas.
El trágico suceso ocurrió cuando un jeep se fue al precipicio en una zona montañosa, a unos 35 kilómetros de Muzaffarabad, la capital regional.
Según informó el comisario adjunto Nadeem Ahmed Janjua, el vehículo sobrecargado de pasajeros y al parecer, por un desperfecto mecánico, se fue barranco abajo y terminó en las aguas del río Neelum.
«La investigación inicial apunta a que el eje del vehículo se rompió, lo que provocó que el conductor perdiera el control», explicó Janjua.
Los equipos de rescate encontraron inicialmente 14 cuerpos sin vida y dos niños gravemente heridos. Lamentablemente, estos dos pequeños fallecieron después por sus heridas.
Pero no todo fue oscuridad en esta tragedia, ya que dos menores, uno de 10 y otro de 7 años, lograron sobrevivir al accidente.
Esta desgracia nos recuerda otro incidente reciente en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, donde un estudiante perdió la vida y otros 40, en su mayoría jovencitas, resultaron heridos cuando su autobús escolar se fue a una zanja el pasado 28 de junio.