La niña de iniciales S.P.A de 4 años, resultó con graves lesiones ayer lunes, al ser atropellada por un motociclista que huyó del lugar en la entrada a la comarca Los Castro, kilómetro 17 de la carretera a Xiloá, en el municipio de Mateare.
Cazadores de noticias informaron que la niña se salió de su casa sin que sus padres se dieran cuenta hasta que gritó al ser impactada por la moto.
La afectada fue llevada a un centro asistencial con trauma craneal, golpes en distintas partes del cuerpo y excoriaciones.
Por otra parte, de donde fue el cine Blanco, cuatro cuadras al lago y dos al este el motociclista Steven Massiel Martínez, de 24 años, resultó con fractura en el pie izquierdo, así como golpes y excoriaciones al colisionar contra el motociclista Alberto Morales, quien resultó ileso.
En otro caso, del colegio Simón Bolívar una cuadra al este, en el barrio Guanuca, de la ciudad de Matagalpa, la joven Karen Vanessa Arauz, de 24 años, se fracturó el brazo derecho, al colisionar en su moto Boxer placa M 29949, contra el taxi matrícula MT 179, por lo que paramédicos de Cruz Roja la llevaron al hospital César Amador Molina.
Otra motociclista que se accidentó ayer lunes es María Mayorga Cerda, de 29 años, quien fue impactada por el taxi placas M 06749, conducido por Jairo Rosales, cuando transitaba de los semáforos de Enel Central cuadra y media arriba, en Managua.
A pesar del politraumatismo y policontusiones que sufrió María Mayorga, fue atendida por paramédicos en el lugar, ya que dijo que no podía ir al hospital porque el taxista se le iba a “bailar” y tenía que responsabilizarse por los daños que le causó a su moto.
Igualmente la joven Claudia Marcela Blandino Urroz, de 20 años, sufrió golpes y chollones al perder el control de su moto placa M 214614, y estrellarse contra el toldo de un negocio ubicado en el kilómetro 11 y medio de la carretera vieja a León.
A pesar que los paramédicos de la Cruz Roja iban a trasladar a Claudia Marcela, a un centro asistencial, esta se negó, indicando que no ameritaba ser llevada y que se iba a arreglar por los daños que le hizo al toldo de María Esther Zamora.
Sin embargo lo que quería Claudia Blandino era evadir a la policía ya que cuando esta se presentó al lugar, le pusieron el alcoholímetro, encontrándole dos grados de alcohol por litro de sangre, por lo que la multaron y suspendieron la licencia.