MADRID — Después de 16 años de su debut, el último superviviente de la ‘novena’ Copa de Europa abandonaría el Real Madrid, según divulgó Television española (TVE). Iker Casillas habría llegado a un acuerdo con la directiva para abandonar el club este verano. Siempre de acuerdo con la televisora del estado español, el capitán del club blanco habría tomado la decisión de poner fin a su carrera como merengue ante la inminente llegada de David De Gea a la portería del equipo.
El también madrileño David de Gea ha sido el principal objetivo del Real Madrid para reforzar al plantel este verano y, según los últimos reportes, el todavía arquero del Manchester United estaría cerca de firmar su contrato como merengue. Tanto, que según la cadena SER, el anuncio de su contratación podría hacerse público a mediados de la próxima semana.
Pero no es la llegada de De Gea lo que ha cambiado para Casillas desde el 27 de mayo pasado en que en una entrevista con el Larguero aseguró que se sentía “fuerte” para permanecer en el club, sino la del técnico Rafa Benítez y su preferencia por Keylor Navas, que en el estira y afloja entre los madrileños había quedado en un segundo plano para todos menos para el nuevo cuerpo técnico del conjunto blanco.
De acuerdo con TVE, Casillas habría tomado la decisión de marcharse y evitar así convertirse “en un problema” para el club, pues su presencia haría que la polémica en torno a la portería merengue no haría más que agudizarse – un tema, de por sí desgastado en el Santiago Bernabéu. La posible salida de Casillas ha sido un tema recurrente desde que concluyó la temporada, pese a que en mayo pasado, el arquero había declarado en una entrevista con la cadena SER que “estoy seguro que seguiré; me veo bien y fuerte”.
Desde el momento en que el antiguo entrenador del equipo José Mourinho lo acusó de ser el soplón del vestidor, nada ha sido igual para Casillas. La grada del Bernabéu lo somete a un escrutinio constante en cada partido e, invariablemente, termina pagando los platos rotos por cada derrota. Incluso ha llegado a llevarse más de una rechifla aún cuando el equipo merengue golea por 4-1, como sucedió el año pasado ante Getafe.
En una de sus últimas apariciones en el Bernabéu, en el empate 2-2 ante Valencia, se agotó la paciencia de Casillas con sus miles de detractores y lanzó improperios al aire apenas acabar en el partido en que, como ha sido habitual en los últimos tiempos, se había pasado gran parte del tiempo aguantando el escarnio de la grada.
Inmediatamente comenzaron las especulaciones con respecto a su futuro, pues para entonces, ya se esperaba la llegada de David De Gea. Días después, trascendió que el director general del club, José Ángel Sánchez, había asegurado al jugador que contaban con él.
Lo que cambió el panorama para Casillas, no obstante, fue la confirmación de Rafael Benítez como reemplazo de Carlo Ancelotti en la dirección técnica merengue. Y si bien lo primero que hizo Benítez tras asumir el cargo fue enviar a Xavi Valero, su preparador de porteros, a la concentración de la selección española donde se le vio charlando con el todavía capitán merengue, Casillas no pasó por alto la manera en que evitó comprometerse públicamente a respaldarlo.
Curiosamente, los tres arqueros, Casillas, De Gea y Navas, coincidirán el jueves en el amistoso entre España y Costa Rica que se disputará en León aunque, como en el Madrid, solo dos podrán tomar parte del encuentro.