La mediciones que brindan estos dispositivos pueden aumentar la productividad en el ámbito laboral
No es ningún secreto que la tecnología portátil puede mejorar nuestras vidas: algunos la usan para proveer entretenimiento, y otros, para medir la efectividad del ejercicio físico. Pero según un estudio también pueden tener su lugar en el trabajo.
El Instituto de Estudios Administrativos (IMS, por sus siglas en inglés), en Goldsmiths, la Universidad de Londres y Rackspace (la compañía de la nube) se unieron en una colaboración llamada Human Cloud at Work para investigar el impacto de este tipo de dispositivos portátiles en el ambiente laboral.
En un estudio de un mes, se les dio tres elementos a los participantes: la muñequera acelerómetro GENEActiv (que mide el movimiento y la actividad física), el biosensor EEG portátil NeuroSky Midwave (que monitorea la actividad cerebral) y el LUMOback (un sensor de postura y actividad).
En los resultados, iniciales se demostró que la productividad de aquellos que utilizan la tecnología portátil aumentó un 8,5% y la satisfacción en el trabajo un 3,5 por ciento. Sin embargo, son las organizaciones las que se benefician más si la tecnología se usa en el trabajo para saber más sobre sus empleados, informa CNN.
Por ejemplo, de una participante se pudo saber que suele dormirse tarde, no hace deporte, se concentra poco y tiene largos períodos sedentarios. De todos estos factores, se puede determinar que es probable que en el futuro tenga problemas de salud, pero sus condiciones laborales se pueden modificar para que se adecúen a su estilo de vida y mejoren ampliamente su productividad.
Por supuesto, esto implica que el trabajador muestre aspectos de su vida diaria y privada. Es por esto que es importante que los que recopilen estos datos tan personales lo hagan responsablemente y los usen de forma sensible y apropiada.