La ‘Candy Crush’ manía parece que va más allá de un simple juego de distracción o una trampa mortal adictiva de los últimos años. De acuerdo con un artículo publicado en Polygon, desde la perspectiva de las matemáticas, el juego de los caramelos de King se encuentra en una categoría de resolución de problemas computacionales de alto nivel.
El estudio fue realizado por la Universidad de New South Wales. El profesor e investigador Toby Walsh reveló que Candy Crush pertenece a la clase de problemas matemáticos NP, uno de los grupos más difíciles para encontrarles solución.
Walsh y su equipo de trabajo estudiaron a ‘Candy Crush’ a partir de un método utilizado para analizar otros juegos como ‘Super Mario Bros’ o ‘The Legend of Zelda’, que demostraron también ser de alta complejidad. Por su parte, el juego de los caramelos se encuentra en el subgrupo de problemas que se vuelven más complicados de resolver a medida que aumentan de nivel.
Esta complejidad podría explicar el por qué existe tanto atractivo hacia este juego que todavía tiene a millones de seguidores intentando superar cada uno de los niveles: “La adicción puede basarse en que el juego es un rompecabezas computacional difícil de resolver”. En la vida real, entre las situaciones que pertenecen a este nivel de complejidad se encuentran la planificación de calendarios o la de las rutas de un viaje.
Por el momento todavía se sigue esperando la puesta en venta de acciones del juego por parte de King, su compañía creadora, que según indica el medio, podrían tener un valor entre 21 a 24 dólares por acción.