Una mujer británica se diagnosticó a sí misma cáncer después de que los médicos no fueran capaces de hacerlo.
‘Armada’ con la descripción de la enfermedad encontrada en Google, que se correspondía con sus síntomas, Greaves exigió que le hicieran un chequeo especializado que confirmó que tenía una forma avanzada de cáncer de amígdalas.
Ahora Greaves está recibiendo tratamiento y, aunque todavía no ha superado la enfermedad, los doctores creen que tiene bastantes posibilidades de curarse completamente.