Dos personas murieron y cuatro resultaron heridas tras la explosión de un artefacto dentro de un bar-restaurante ubicado en el estado de Guanajuato, México.
Un hombre a bordo de una motocicleta entregó una caja en el bar Barra 1604 mientras se celebraba la fiesta de cumpleaños de su propietario, instantes después detonó.
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador identificó a las víctimas como Mauricio Salvador Romero Morales, el dueño, y Mario Alberto Hernández Cárdenas, el gerente del comercio.
La bomba instalada fue sumamente precisa ya que fue diseñada para matar a la persona que abrió la caja, con una onda expansiva de 5 metros de diámetro, advirtieron analistas de seguridad.
El diario Milenio informó que los propietarios ya habían denunciado anteriormente que estaban siendo extorsionados por miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación, quienes les exigían un pago de 50 mil pesos semanales.
Los medios mexicanos destacaron que a menudo las bandas narcotraficantes utilizan explosivos, aunque generalmente usan granadas de fragmentación y hasta drones aéreos.
