La rotonda de la ciudad de Rivas se ha convertido en el punto de reunión de una veintena de motociclistas, quienes después de terminar su jornada laboral se ganan sus “billetitos” extras, ofreciendo el servicio de transporte en moto a distintos municipios del departamento sureño.
EL PIONERO
El pionero de esta iniciativa de transporte selectivo fue don Julio César Bustos Álvarez, de 66 años, quien dejó el negocio debido a problemas en su salud.
El popular rivense relató que la idea le surgió el día en que un ciudadano le pidió a eso de las 4: 30 de la tarde que lo llevara al sector de la carretera panamericana para alcanzar el bus que cubre la ruta Rivas – Managua, y descubrió que el negocio era rentable por el bajo costo del pasaje.
El servicio es más rentable en horas de la noche y la madrugada, y la tarifa cuesta 20 córdobas dentro de la ciudad de Rivas y 30 córdobas hasta municipios de San Jorge y Buenos Aires.
Los principales clientes de los transportistas de dos ruedas son los trabajadores que termina su jornada diaria, viajeros provenientes de Costa Rica y rivenses que frecuentan centros recreativos durante la noche.
Eliécer Barrera de 34 años, es uno de los motociclistas quien después de salir de su trabajo se traslada a la rotonda de Rivas y ofrece sus servicios desde hace tres meses y el ingreso obtenido lo invierte en el pago de las cuotas de la moto y sus gastos universitarios.
Los motorizados también son contactados por sus clientes vía celular y como medida organizativa tienen previsto formar una organización para ser legalizados por la Alcaldía de Rivas con el fin de que la población se sienta segura de hacer uso del servicio.