El palacio municipal de Granada se alza una vez tras el intento de reducirlo a cenizas por completo. En esta ocasión los ataques no fueron por piratas e invasores, sino por la violencia golpista promovida por los malos hijos de la Patria, amantes de la violencia y el terror, en un intento por derrocar al Gobierno del Frente Sandinista
La primera etapa que abrió sus puertas fue una exhibición de arte en la que se rinde homenaje al príncipe de las letras castellanas Rubén Darío.
El Reverendo Guillermo Zúniga, encargado de pronunciar oraciones al altísimo durante la inauguración, aseguró que son oraciones por los Gobernantes “por el comandante Daniel, por la compañera Rosario, por todos los ministros, por los miembros de la Asamblea Nacional, por la Policía, por el Ejército, por nuestras autoridades municipales”.
“Oramos también para que se siga construyendo el futuro de Nicaragua sin ningún tropiezo. También te pedimos señor por todas las personas que fueron víctimas del odio, te pedimos también padre eterno por esos que quisieron implantar el odio en todo el pueblo”, dijo durante las plegarias.
El vicealcalde y artista Pedro Vargas recordó que el edificio, a pesar de ser una reliquia, hoy está como nuevo, reconstruido por los esfuerzos municipales y el apoyo del Gobierno Central.