Como una capital fuerte y valiente, es considerada por sus pobladores la ciudad de Managua, que se ha mantenido de pie a pesar de sufrir los terremotos de 1931, 1972 y los recientes en abril del 2014.
Edificios como la Antigua Catedral de Managua, ubicada en la Plaza de la Revolución, son prueba de esa fortaleza estructural que una vez más se impuso, soportando el pasado terremoto del pasado 10 de abril. “Aumentó el tamaño de las grietas, movió las bases y pilares, destruyó parte de las cúpulas”, pero se mantuvo firme como un gigante, dijeron pobladores de sectores aledaños.
En ese sentido, la Alcaldía de Managua, por orientaciones del Gobierno Sandinista, delegó una comisión especial, que trabaja en el censo de levantamiento de daños en las estructuras capitalinas, y conocer la magnitud por la reciente actividad sísmica.
Ante la ordenanza presidencial, y para salvaguardar la vida de las familias que vivían en edificios con más de 50 años de antigüedad, la Alcaldía capitalina demolió 38 edificios de la vieja Managua, evacuando 1 mil 900 personas agrupadas en 478 familias, en el IND.
Como parte de la misma pesquisa de daños, a nivel de los 7 distritos de Managua, se contabilizan unas 82 viviendas destruidas y 35 con daños parciales, en el municipio de Nagarote 47 colapsadas y 1 mil 153 con daños parciales, las que están recibiendo el acompañamiento del Gobierno Sandinista.
En otros municipios, como Mateare se destruyeron 49 casas y 388 resultaron con daños parciales, en Ciudad Sandino, se reportan 17 destruidas y 10 semidestruidas, y en La Paz Centro, se contabilizan unas 229 viviendas con daños parciales.
Ante esta situación, el Gobierno Sandinista mantiene vigente la alerta roja a nivel nacional, con énfasis en los departamentos de Managua y León, orientando la realización de simulacros para estar preparados ante cualquier desastre natural.