De un balazo en la frente fue ultimado Franklin Pineda, de 28 años, a manos de Frank Fernando Chavarría, de 30, tras topárselo en una de las calles del barrio Martha Quezada, en la comarca Wamblán, en Wiwilí, Jinotega.
Según testigos, Frank Fernando Chavarría cometió el crimen “por puro gusto”, pues sin haberle hecho nada se le acercó a Franklin Pineda, y lo mató.