Tras varios intentos, capitalina logra matarse por un amor compartido

Luego de tomar diferentes tipos de veneno en cinco ocasiones para acabar con su existencia, la joven Karla Patricia Cano Álvarez finalmente murió este sábado en el hospital Lenín Fonseca, por los estragos de dos tabletas de gastoxin.

Karla Patricia Cano habitaba cerca de la iglesia de Monte Tabor, en el kilómetro 12 y medio de la carretera Sur, en Managua, donde según algunos parientes, mantenía relaciones con un hombre de 55 años, quien convivía con otra mujer.

Los familiares afirmaron que la joven era madre de tres hijos de una relación anterior, y especulan que el hombre podría haberla “hechizado” ya que desde que se metió con él, se desesperaba por verlo y cuando se ausentaba entraba en depresión.

Los dolientes aseguran que cada vez que el hombre se le perdía, Karla Patricia buscaba como matarse y la penúltima vez que lo hizo fue el 19 de enero de este año, cuando se tomó un trozo de tableta de fosfina, pero afortunadamente fue salvada.

Las veces anteriores, Karla Patricia también tomó otros tipos de venenos que le fueron mermando sus capacidades física-motoras, lo que causó que su amado también se le fuera alejando, hasta que ya no soportó su soledad y decidió garantizar su muerte.

Si te gustó, comparte

Más Noticias